sábado, 7 de marzo de 2015

Extracción prematura de los dientes de leche

Los dientes de leche son aquellos que aparecen durante la infancia, pero que se desarrollan durante el período embrionario en la boca. Estos dientes forman un conjunto de 20 piezas que son consideradas la preparación para los dientes de la etapa adulta (los dientes permanentes). El término exacto para definir a los dientes de leche es dentición decidua, temporal o primaria.

Ahora, ¿por qué se les comenzó a decir dientes de leche a los dientes primarios? Dicen que tiene que ver con el hecho de que cuando al bebé le salen estos dientes, su alimentación básica es la leche materna; otros por el contrario, dicen que el término se debe al color de la dentadura que es similar al de la leche y esto se debe a que su tiempo de maduración y la capa de dentina, que es lo que le da un color amarillo al diente, son menores.

Antiguamente, no se le daba mucha importancia a los dientes deciduos porque se consideraba que luego se caerían y crecerían los nuevos dientes permanentes, sin embargo la odontología moderna, considera que los dientes primarios tienen tanta importancia como los permanentes porque ayudan a los bebés a comenzar a consumir alimentos sólidos, también los ayudan en el desarrollo del lenguaje, colaboran con el desarrollo de la mandíbula del bebé y sirven de guía para los dientes permanentes, que comenzarán a crecer alrededor de la edad de 6 o 7 años, por lo que es importante cuidarlos.

Muchos padres de familia deben saber que extraer un diente de leche antes de tiempo, principalmente los molares de leche, puede causar apiñamiento dental en los futuros dientes permanentes.

La razón es que cuando se extrae el diente de leche antes de tiempo, el espacio dejado se va acortando, el diente permanente que quiera salir no tendrá el espacio suficiente para que encaje en el lugar que se extrajo. Al forzar su salida, irá apretando los dientes anteriores (caninos e incisivos) y producirá el apiñamiento clásico, en estas situaciones los más afectados son los caninos, estos quedan montados por ser los últimos en erupcionar (entre 10 a 12 años).

En caso de que se haya perdido el diente temporario, por traumatismo o por caries no tratables, es necesario hacer uso de los mantenedores de espacio y realizar controles radiográficos periódicos, ello va permitir cuidar los espacios requeridos para el buen posicionamiento de los dientes permanentes, además tomar estas medidas a tiempo evitará tratamientos futuros de ortodoncia.



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