El proceso de formación del flemón comienza cuando aparece en la pieza dental un acceso que deja libre el camino de las bacterias hacia la raíz del diente. Normalmente hay una entrada de bacterias hacia la raíz del diente bien por una caries, lo más común, o por movilidad del diente como consecuencia de alguna enfermedad periodontal.
Al producirse la infección se acumulan desechos bacterianos, que forman pus y este ocupa espacio dando una presión en la zona y un dolor intenso. Las bacterias a través de este camino abierto, consiguen infectar la pieza dental, la pulpa, la raíz e incluso el hueso.
Los principales síntomas son dolor intenso y punzante, hipersensibilidad dental, encías rojas e inflamadas, halitosis y mal sabor de boca, fiebre, inflamación de ganglios del cuello, inflamación de la zona de la cara afectada por el flemón.
Se recomiendan antibióticos de amplio espectro para combatir la infección, el uso de enjuagues bucales también es muy importante es este proceso de infección, pero lo más recomendable es siempre ir a un especialista antes que la infección avance.
Consultorio: La Paz entre Galleguillos y Corneta Mamani
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