profesión científica, noble y generosa! Es necesario formar odontólogos científicos, capaces de investigar y producir beneficios directos a la población. formados con mentalidad eminentemente preventiva que le permita mantener bucodentalmente sana a la población y no como tradicionalmente se ha hecho, condenarla a enfermarse para atenderla en sus consultorios.
En consecuencia con lo expresado, ese nuevo odontólogo debe conocer profundamente áreas como la genética, inmunología, nutrición, tecnología educativa, laboratorio clínico, informática y, además, tener una sólida formación humanística y de compromiso social que le permita conocer al hombre como ser social, económico, político y biológico, para así comprenderlo y entenderlo idealmente y, sobre todo, procurar su bienestar y felicidad manteniéndolo bucodentalmente sano.
¿Qué se vislumbra con la nueva odontología? Una gran mayoría de población libre de caries dental, enfermedades de las encías y otras patologías bucodentales, con una condición de salud óptima. Quedarán por resolver los problemas de anomalías dentomaxilofaciales, o sea aquellos solucionabas actualmente con métodos de ortodoncia, pero, que seguramente con la nueva tecnología que se derivará del conocimiento del genoma humano y con la mentalidad preventiva de la humanidad pronto desaparecerán.
En el futuro cercano será posible observar a toda una legión de profesionales atendiendo pacientes en sus consultorios pero para mantenerlos bucodentalmente sanos, mediante la aplicación de medidas de revención específica, complementarias unas de otras, como la educación en salud bucal, control de placa dental, control de dieta, indicaciones sobre el cuidado e higiene bucodental, aplicaciones tópicas de fluoruros, colocación de sellantes de fisura y mantenimiento preventivo permanente. Para esto sólo basta que
la comunidad lo exija, ojalá desde ya. pues los odontólogos están preparados para brindarles esa tecnología.
Por otra parte, los gobiernos deberán impulsar medidas de amplio espectro. gran cobertura, como el control genético, control biológico, control inmunológico (vacunas), fluoruración de acueductos o de la sal, educación masiva a través de la televisión, radio y prensa, programas escolares como lo aprobado por el Concejo de Bogotá, Colombia, mediante acuerdo que obliga a que todos las escuelas y colegios de Bogotá a realizar programas preventivos contra las enfermedades bucodentales y que dispongan de espacios arquitectónicos para llevarlos a cabo. Este acuerdo fue elaborado por los odontólogos Benjamín Herazo Acuña y Orlando Moneada Bensán y presentado como ponencia al Concejo por los Concejales Uldarico Parra y María Teresa Ocampo de Hcrrán.
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